La Familia es el núcleo, la célula madre de la unión, dios bendijo al hombre y la mujer para que formaran una sola carne y así bendijo los frutos de esa unión.
La familia es la constitución mas bendecida por dios ya que son la representación de la Sagrada Familia constituida por San José, la virgen maría y el niño Jesús

viernes

Presentación y Justificación

El inicio del desarrollo de todo ser humano se da en el círculo familiar. Aunque existen diferentes circunstancias alrededor de la crianza de las personas, ese grupo en el cual se empiezan las actividades motoras, cognitivas, mentales y demás, son las bases de muchos de los comportamientos, reacciones y actitudes que se ven reflejados en el desempeño que tengamos más adelante. El ser humano como tal es un ser social que ha sido creado para comunicarse e interrelacionarse con los otros y es por esta razón que aunque se tengan diferentes creencias, culturas, opciones de crianza y otras tantas variables, es necesario tener una serie de valores que son básicos y fundamentales en la formación y el desarrollo de todo ser humano.

jueves

La Familia Propósito de Dios

Nos preguntaremos por qué es tan importante para las personas tener una familia. Pues como todo en la vida, hay una razón de ser para la familia, no fue creada porque sí, Dios tuvo un propósito para cada persona que conforma una familia, así el padre tiene la función de representar y dar a su familia, seguridad, provisión, respeto, responsabilidad; la madre por su parte representa entrega, cariño, paz, dirección, consejo y los hijos son el resultado de lo aprendido por sus padres, además la consumación del amor entre padre y madre, una semilla que nació en el corazón de Dios y sólo se materializó por medio de estos dos seres llamados padres. Aunque muchas personas no cuentan con una familia completa, pues en estos tiempos es normal ver familias disfuncionales, con una madre, ó un padre, un padrastro, una madrastra, los abuelos, etc., de igual manera el ideal de Dios siempre fue que todos contáramos con una familia completa, con un padre, con una madre, pero lastimosamente nosotros los seres humanos con nuestro libre pensar, cambiamos los planes de Dios y comenzamos a cambiar estos propósitos, formando así personas faltas de cariño, inestables, prepotentes, egoístas, que piensan sólo en obtener reconocimiento social pero sin preocuparse por quienes están a su alrededor. Muchos dirán: Y qué tiene que ver la familia con esto? Pues sencillo, no se pueden evidenciar comportamientos que no han sido enseñados y una madre o un padre solos no logran cubrir la cantidad de virtudes que deberían aprender los niños desde que nacen. Así es que cuando nos preguntemos por qué estamos como estamos, pensemos primero, cómo están nuestras familias para responder esta inquietud!

miércoles

Familia y Sociedad en Las Enseñanzas de La Iglesia

Es indiscutible la responsabilidad que tienen los padres en el cultivo de la fe en la propia familia. No sólo respecto de los hijos, sino como pareja, pueden ayudarse cada día a conocer, vivir y transmitir la fe de una manera tan simple como darle gracias a Dios, por un nuevo día, por los alimentos, por todo lo que nos rodea. La oración en familia es un momento importantísimo que debemos aprovechar con los hijos .participar juntos, como familia, en la misa del domingo es una tradición que vale la pena conservar. Es precisamente en la familia donde los hijos se forman en la fe, en las virtudes y en los valores, puesto que somos los primeros maestros.

Por desgracia, hoy en día en algunos colegios no se ofrece una buena enseñanza de la fe, en otros, incluso, se les enseña ideas equivocadas, con el pretexto de que debemos respetar la libertad de creencias y eso ha llevado a muchas equivocaciones con los jóvenes que perdieron el temor a Dios, y el temor a todo, son seres vacíos, sin identidad, vulnerables, débiles, viven la vida imitando a otros en conductas, actitudes y moda y todo porque no tienen unas bases fuertes que debieron ser cimentadas desde su familia.


lunes

La Familia y los Valores

Vivir los valores, es reconocer en el otro a mi propio yo; es saber que mis libertades van hasta donde empiezan las del otro y de esta manera, optar por tener actitudes y comportamientos que vayan acorde a lo que llamamos “sentido común” para poder vivir en sociedad. No podemos permitir que por la “revolución de las cosas” que abarca la modernidad, las tecnologías y ciertas tendencias, la práctica de los valores se convierta en algo ligero, de carácter anticuado y que nada tiene que ver con esta época; por el contrario, se deben vivir como puntos de referencia para las actitudes, las respuestas y lo que la vida pone a diario a nuestro alrededor. Pero, el reconocimiento de estos valores se da en la familia, lugar en donde el niño empieza a ver la forma en que se dan las relaciones y reacciones con los otros miembros, además con quienes son amigos cercanos, familiares y las personas en general. Si en ese círculo de familia no se ve el respeto, la tolerancia, la paciencia y otros valores, ¿qué podemos esperar de este niño en el futuro? Debemos entender como padres y miembros de una familia que quienes son los niños de hoy, serán los padres del mañana que verán crecer a sus hijos y así sucesivamente; de igual manera serán los profesionales y emprendedores del futuro, ¿qué haremos con tantas personas sin ética, sin principios y hasta sin respeto por ellos, por la vida misma y por la de los demás?
Debemos evaluar y reflexionar sobre nuestra vida y el papel que desempeñamos no sólo como padres sino como forjadores de seres humanos en proceso de crecimiento y de evolución, ¡por un mejor presente y por un mejor mañana!